Es muy importante tener bien claro cuáles son los gastos e impuestos al comprar una propiedad en Andalucía. Por eso, es necesario estar muy bien informado, hacer las cuentas y contar con asesoramiento profesional. Lee nuestra Guía del Comprador aquí.
Dependiendo de si compra una vivienda de obra nueva o una reventa, se paga IVA & AJD (Actos Jurídicos Documentados), o ITP (Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales) respectivamente.
Obra Nueva
Las viviendas de Obra Nueva son todas aquellas que se venden por primera vez y no fueron ocupadas antes. A este tipo de viviendas se le aplica el IVA, que es el 10% del precio de compra. El AJD es equivalente al 1,5% del precio de compra. Si la vivienda se encuentra aún en construcción y se hace un pago de depósito a cuenta, este también está sujeto al IVA. Lee este artículo para saber las pregunts más relevantes a la hora de comprar sobre plano.
Segunda Mano o Reventas
Las viviendas de Segunda Mano o Reventas son todas aquellas que ya han sido vendidas anteriormente, aunque sea una vez. A este tipo de viviendas se le aplica solamente el ITP (Impuesto sobre Transmisión Patrimoniales) y lo paga el comprador. El AJD ya está incluido en este impuesto. Si se paga algún deposito a cuenta antes de la escritura, este no está sujeto al pago proporcional de ITP, sin embargo, la totalidad del impuesto debe ser pagada en escritura. Este impuesto está sujeto a la comunidad autonómica donde se realiza la compra y al precio de la vivienda. En Andalucía varía en tramos con respecto al precio. Por ejemplo: del 8% hasta 400.000€, del 9% hasta 700.000€ y lo siguiente al 10%. Es importante mencionar que los porcentajes se agregan por tramos, por lo que una vivienda de 900.000€ pagaría hasta 400.000€ al 8% + 300.000€ al 9% + 100.000€ al 10%.
Hay otros gastos que afectan a los dos tipos de compra, por favor seguir leyendo
Gastos de Notaría & Inscripción en el Registro
Los gastos de notaría generalmente son pagados por el comprador y se calculan en relación con el precio de compra de la vivienda. Habitualmente rondan el 0,5%. Los gastos relativos a la inscripción de la vivienda en el Registro de la Propiedad también son pagados por el comprador y calculados en base al precio de compra. Suelen rondar el 1%. Para estar seguros es aconsejable calcular un 1,5% entre los dos, aunque debería ser menor.
En resumen, los costes oficiales relacionados a la compra de una vivienda en Andalucía pueden variar desde 10 % en reventas o bien desde 13% en residencias nuevas. Hay que tomar en cuenta que estos gastos no cubren los honorarios legales, gastos bancarios ni otros gastos relacionados con la hipoteca. Por favor siga leyendo para tener más información sobre otros gastos.
Asesoramiento Legal
Es muy importante contar con asesoramiento legal durante la compra de una vivienda, no solo por la barrera idiomática que pueda existir, sino por la tranquilidad que le va a dar utilizar sus servicios. Es obligación de su abogado revisar los contratos, las cargas de la propiedad, los permisos, licencias, coordinar y comprobar toda la documentación durante el proceso de compra. Además, su abogado podrá explicarle cualquier asunto referente a lo legal y administrativo de la compra de su vivienda. Los honorarios de los abogados varían entre un 1% y 1,5% del precio de compra. Puede parecer un poco excesivo, pero la tranquilidad que se gana es directamente proporcional.
Gastos de Hipoteca
Si se compra con financiación, esto puede ocasionar varios gastos adicionales. Primero, el banco debe realizar una tasación, que normalmente cuesta alrededor de unos 600€ y lo paga el comprador. Una vez que la financiación sea otorgada, se encuentran los gastos de la hipoteca en sí. Estos gastos pueden variar de acuerdo al banco que se haya elegido. Una nota importante es que la hipoteca generará gastos de notaría adicionales.
Gastos Bancarios
A la hora de pagar la transacción de compraventa, debe hacerse a través de un cheque Bancario, aunque la operación se lleve a cabo sin financiación. Para este propósito, es necesario abrir una cuenta bancaria hacia donde los fondos serán transferidos desde el país de origen. Los gastos de la transferencia no deberían ser superior a 0,5% de la cantidad transferida. El cheque bancario suele rondar la misma cantidad.
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